Hoy en día, morir de viejo es todo un privilegio. No cualquiera. Muchos son los que se van sin siquiera haberlo podido intentar. Hoy vuelve a ser frecuente que te despojen arteramente de esos muchos años que podrías haber tenido por delante. ¿Muchos? ¿Qué tanto es mucho, qué tanto poco? Quizás “mucho” es igual… Continuar leyendo