”Bibliodiversidad, bibliotecas, escuelas y librerías: El ecosistema y fomento de la lectura”, tema de Quehacer Editorial 19

A raíz del arranque del nuevo gobierno en México se ha desatado una creciente polémica en torno a las políticas del Estado en materia de promoción de la lectura. Más allá de crispaciones políticas e ideológicas, urge orientar el debate hacia una reflexión fundamentada que nos lleve a encontrar caminos viables para lograr los objetivos. El número 19 de nuestra revista Quehacer Editorial invita a los integrantes de la cadena del libro y la lectura a sumarse a este esfuerzo y a enviar ensayos con una extensión de entre 8 y 18 cuartillas. Temas centrales: Bibliodiversidad, bibliotecas, escuelas y librerías. El ecosistema y fomento de la lectura. Favor de enviar los ensayos en Word al correo alejandro.zenker@solareditores.com. Los interesados pueden consultar la versión electrónica de números anteriores en www.quehacereditorial.com. Cierre de la edición: 30 de junio de 2019. Aquí algunas de las interrogantes que flotan en el aire:

¿Qué se necesita para fomentar la lectura en un país? ¿Bibliodiversidad? ¿Libros gratuitos o económicos? Se calcula que hasta el año 2010 se habían producido alrededor de 150 millones de títulos a lo largo de la historia de la humanidad. De entonces a la fecha, el corpus bibliográfico ha aumentado exponencialmente. Ante una población que lee menos de tres libros en promedio al año, ¿qué tan importante es propiciar la bibliodiversidad? ¿Cómo fomentar la lectura? ¿Cuál es la ecuación correcta entre educación, alfabetización y creación de hábitos de lectura en el sistema educativo? ¿Cómo determinar el corpus de los libros promovidos para lectura masiva a precios bajos sin manipular ideológicamente a la población? ¿Cuál es el papel del Estado en la promoción de la lectura? ¿Cuál el papel de la industria editorial? ¿Cómo propiciar un ecosistema diverso y amplio de distribución y venta de libros? ¿Cómo incentivar la creación de más librerías en todos los rincones del país y no sólo en las grandes urbes? ¿Debe el Estado convertirse en editor y distribuidor y competir, o incluso desplazar, a la industria editorial privada? ¿Pueden coexistir Estado-industria privada sin colisionar intereses? ¿O debe el Estado abstenerse de realizar una actividad editorial propia y apoyar más bien los esfuerzos de la industria editorial privada? ¿Cómo generar una industria editorial fuerte, diversa y socialmente comprometida? ¿Es importante fortalecer una industria editorial nacional frente a la creciente concentración de capitales en pocas entidades editoras transnacionales que fomentan la bestsellerización del mercado? ¿Cuál es el papel de las bibliotecas? ¿Cuál el de las ferias del libro? ¿Qué podría hacer el Estado para incentivar la creación de librerías y mercados itinerantes (mercados sobre ruedas) en todo el país? ¿Cómo promover la lectura? ¿Basta hacer accesibles los libros o se necesita una actividad de promoción presencial? ¿Cómo crear un ejército de promotores de la lectura? ¿A través de las redes sociales, de nuevas tecnologías? ¿Cómo atender las necesidades en un país multiétnico, plurilingüe, de grandes contrastes socioeconómicos? ¿Cómo garantizar y fomentar la equidad de género, la tolerancia, la inclusión en la política editorial? ¿Pueden ser el libro electrónico y el libro impreso bajo demanda herramientas de promoción de la lectura y de la bibliodiversidad? ¿Qué modelos tecnológicos podrían desarrollarse para fomentar la bibliodiversidad y lectura? ¿Deberían estos desarrollarse y potenciarse como política de Estado o deberían pertenecer al ámbito de la sociedad civil? ¿Cómo promover la participación de todas las entidades socioeconómicas, educativas y culturales públicas y privadas en la promoción de la lectura?