En esta semana de intensas actividades vino nuestro amigo Sandro Cohen a visitarnos y a echar una buena platicada que desde hace semanas nos debíamos. Los tiempos son complicados por lo que compartir inquietudes con un amigo hace posible ver más allá de lo que las circunstancias a veces nos permiten. Además, los temas que podemos abordar son amplios, pues hemos recorrido mucho camino juntos. Ambos hemos sido editores, pero también traductores y autores. Sandro ha estado últimamente más centrado en su labor académica en la UAM y en sus clases de redacción sin dolor, así que lo puse al tanto de lo que ha estado ocurriendo en el medio, desde la creación de la LEI (Liga de Editores Independientes), el surgimiento de la RELI (Red de Librerías Independientes), la organización de los Trabajadores de la Edición, las reflexiones con los colegas de la Asociación Mexicana de Traductores Literarios (AMETLI), las grillas infames en la CANIEM, en fin, hablamos ese intenso movimiento de la sociedad civil en estas épocas de cambio. También le compartí nuestro actual trabajo de reorganización de Ediciones del Ermitaño, la Librería del Ermitaño y de Solar como área de servicios editoriales. Quedaron muchos temas en el tapete, que ya habremos de abordar con calma en una próxima reunión en las próximas y previsiblemente lluviosas semanas.