Los hispanohablantes ya sumamos alrededor de 500 millones en todo el mundo, es decir, un chingo y dos montones. El español al parecer es la segunda lengua más usada en Facebook y en Internet en general. Para darnos una idea, en noviembre del 2012 había 359,828,280 usuarios angloparlantes en Facebook y 142,865,540 hispanohablantes. Curiosamente, la tercera lengua más frecuente es el portugués, que es la que más ha crecido en usuarios del 2010 al 2012, seguida del árabe, del alemán y del español. Pero si la tasa de crecimiento del español se mantiene, podría darse el caso de que se convierta en la lengua más usada no sólo en Facebook, sino en Internet en general. No obstante, la lengua que más corpus genera sigue siendo el inglés. De allí que los otrora “defensores de la lengua” se abran a una mayor permeabilidad del español. Si no acoges nuevos vocablos, no te embarazas lingüísticamente hablando. Y si no te embarazas, corres peligro de pasar a ser una lengua obsoletamente cacariza. Por fortuna, hoy quienes han querido dictar normas, ya comienzan a reconocer que es imposible hacerlo. Las lenguas están en un rápido proceso de transformación. Hasta ahora, el inglés ha dictado la pauta. En ese idioma surge gran parte de los neologismos provenientes de ciencia y tecnología. Pero eso podría cambiar. Para que nos demos una idea: de 1950 al 2000 el inglés pasó de un corpus de cerca de 500,000 vocablos, a más de un millón. Se duplicó en tan solo 50 años, esos álgidos años de la posguerra. En el caso del español, lo habla una población multicultural en expansión demográfica, económica, educativa y cultural con una cada vez mayor movilidad geográfica y apertura lingüística que día a día aportará más al corpus mundial. Dada su creciente importancia, sin lugar a dudas una de las batallas fundamentales por el futuro del libro se dirimirá en Latinoamérica, como lo asentó recientemente el periódico El País a raíz de los debates en el VI Congreso de la Lengua Español. Y si los editores del mundo de habla hispana no se ponen las pilas, quienes ganarán la batalla y conquistarán ese gigantesco mercado serán Amazon, Google, Apple, etc. que tienen una capacidad económica infinitamente superior a la de los editores tradicionales pues facturan seis veces más (aprox. 160,000 vs. 25,000 millones de euros). Hay que ir haciendo una vaquita para juntar la lana necesaria para darles la batalla a estos gigantes. ¿Quién le entra?